En Madrid, en el Centro nº 4 para Mujeres Jóvenes Víctimas de Violencia, tenemos mucho que celebrar, nuestras jóvenes, todas ellas super resilientes, nos demuestran cada día, que nadie las va a frenar en su meta por conseguir su autonomía sin soportar más maltrato.
Aunque son muy jóvenes, sus edades oscilan entre 18 y 25 años, ya están dando lecciones de superación a la gente, saben que ellas solas tienen que hacer lo posible por construirse un futuro mejor, aunque se lo han puesto muy difícil, no se rinden.
Ellas quieren romper con su pasado y se agarran al futuro… Por ello, se están esforzando en conseguir ser independientes económicamente, para no depender de nadie nunca más y demostrar que son invencibles.
Varias están terminando sus estudios para poder acceder a mejores puestos, ejercitando su concentración, lo cual no siempre es fácil porque sus recuerdos las siguen dañando, otras compaginan sus trabajos con formación, lo que supone un doble esfuerzo físico y psicológico, algunas están trabajando jornadas completas para conseguir su ansiada documentación, llegando al centro agotadas pero sabiendo que su meta está cada vez más cerca y otras están iniciándose en el mercado laboral de forma progresiva y abriendo su mente a nuevas propuestas.
Son trabajos en todo tipo de servicios, tenemos las mejores camareras, administrativas, peluqueras, cajeras/dependientas en grandes empresas, auxiliares de personas dependientes y auxiliares de recepción, todas ellas se levantan cada mañana trabajándose las ilusiones para poder afrontar un nuevo día, son mujeres cada vez mas empoderadas y nos hacen sentirnos orgullosas a todas y cada una de las personas que trabajamos en la FMA.
Y seguro que, si las conoces, tu también te sentirías orgullosa/o de ellas.